Equis, creció jugando de la única manera en que el verbo jugar no pierde su sentido: Tenía un caballo de sonido que cobraba vida, con solo golpearse las piernas con las manos mientras corría. Sus oídos y una pizca de sal lo transformaban en caballero medieval o indio apache.
El tiempo y las terceras voces del plural, lo desterraron de su propia imaginación. Y allá por los doce años, comenzó a especializarse en jugar a ser mayor, ese juego insulso que solo es divertido al principio, cuando se juega sin muchas reglas.
Salió del pueblo para ir a la universidad y siguió el camino de los viejos cuentos de final feliz que le habían contado. Se integró en la selva del Prestigio y se perdió a sí mismo por el camino. Su carrera de fondo, lo llevó a ese gran armario donde habitan los que no entienden que Ser y Tener no es el mismo verbo. Su tiempo se convirtió en algo tan importante que no podía ser desperdiciado en nada que no fuese hacer dinero o mirar su propio ombligo.
Se avergonzaba de su padre, ese agricultor de formas toscas y manos callosas que no conocía el código de las palabras esdrújulas y que tantos sueños había tejido para él. Y ese agricultor de formas toscas, se avergonzaba secretamente de que sus sudores de agosto con la azada, se hubiesen transformado en un hijo altivo que demostraba su amor cada navidad a golpe de billetera.
Para la educación de sus hijos pagaba grandes cantidades a entidades privadas en las que confiaba plenamente. Y guardaba las caricias no dadas, dentro de un montón de juguetes que envolvía en bonitos papeles de regalo.
...Y así es como, a fuerza de muchos Equis, en una sola generación, los caballos de sonido son – como los unicornios- parte de ese imaginario en peligro de extinción, que no formará parte de la infancia por ser gratuitos.
2 comentarios:
Si a la imaginación le pusieran precio...seguro que querrían comprarla...
Para todo lo demás Master Card...
El esfuerzo no es de nuestro tiempo, ogrillo....y la imaginación es un músculo que hay que ejercitar...
Que tal la cienaga? el duelo puede seguir, de momento le hemos puesto un marco, pero si apetece podemos ir pintando el cuadro, no???
UN BESOTE
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