viernes, 11 de julio de 2008

Entre buhos y chorlitos


El país de los chorlitos en la cabeza, como rey del país, un buho. Cuando el Rey Buho habla, los chorlitos no le prestan atención. Solo domina su reino de verdad, cuando coge su bastón de mando y habla con contundencia...Da tres golpes fuertes con el bastón en el suelo y con esa llamada sus súbditos saben que esta vez el Rey va a hablar en serio...Puede llegar a ser muy duro en sus juicios, pero es necesario si quiere que el país progrese.

   Las manos, el Zoo Mutante. Donde en el mismo contorno habitan unos animales y otros, dependiendo de la luz del sol que los ilumine...Palomas de la paz o mensajeras, pulpos que quieren agarrarlo todo, medusas que si te rozan da urticaria, osos panda deseando acariciar y atraerte hacia sí mismos en forma de abrazo, monos que se rascan, orangutanes que se desparasitan, delfines que nadan en el viento al asomarse por la ventanilla. Mascotas de bolsillo que se esconden el los del pantalón cuando el Rey Buho quiere hablar a su pueblo.

   El estómago es la prisión. Cuando muchas cosas suceden el el país de los chorlitos y hay castigos, se siente en él la presión de los pecados no absueltos...solo cuando el tiempo de las condenas trancurre y las literas van quedando bacías, el peso se aligera y se nota claramente como el carcelero abre las puertas para dejar que pasen las visitas con sus cestas llenas de regalos comestibles y pan de pueblo.


   Piernas y pies. El andamiaje, que hace que todo lo demás esté a la altura de las circunstancias...a veces soporta el peso solo por inercia...porque no sabe hacer otra cosa, porque lleva toda la vida ahí...sin darse importancia. Y solo en casa se quita las mallas verdes y las armaduras amarillas, si por lo que sea se siente pequeño como un tripode de cámara fotográfica...Esperando los tres golpes del Rey Buho, que le darán aliento para volver a acarrear con su carga de la mejor manera.

   Caracoles en el pubis, que la mayoría del tiempo duermen rizados en el monte, sin hacerse notar, pero cuando despiertan, con su andar húmedo y discreto por las entrañas de la madre tierra...convierten en vaho de cuarto de baño todo lo que da igual que vean los ojos...en ese momento...los chorlitos callan y se dan la mano...el Rey Buho cierra sus parpados y solo siente...el zoo lee en braille textos de piel......la prisión apaga las luces para que duerman los presos de guerra...el andamiaje se derrite...y las hadas del corazón bailan brillantes alrededor de la hoguera que se acaba de encender.


  

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